Canales Mecanosensitivos
Es notable nuestra gran capacidad de adaptarnos a las condiciones medioambiantales. Nuestros cuerpos, piel y cerebros nos permiten sensar las condiciones atmosfericas, predecir eventos, buscar o fabricar refugio, vestidos... Resistimos al extremo calor o frío, y nuestra piel nos protege si vamos para una nadada en agua dulce o agua salada. Si las cosas siguen demasiado incómodas, podemos levantarnos y caminar siempre lejos, encontrando un calentador o un lugar más fresco o más seco... Las bacterias tienen menos opciones. Son pequeños y se sumergen en agua, por tanto su ambiente pueden plantear desafíos inmnsos y peligrosos para la vida. Si llueve pueden ser rodeados repentinamente por el agua dulce. Esto es peligroso porque el agua filtra en la célula con ósmosis y aumenta la presión intracelular (turgencia). En otras veces, la bacteria puede ser cambiada de puesto o las condiciones pueden variar repentinamente a medios muy salados, que saca el agua, deshidrata la célulay puede morir por plasmolisis. Sin embargo, así como la vida se adapta a casi todo, las bacterias han desarrollado métodos para resistir estos cambios, así que pueden guardar una presión osmótica constante y cómoda dentro de la misma.
Bacterias Bajo Presión
Las bacterias controlan su presión interna cambiando la concentración de moléculas citoplasmaticas. En condiciones saladas, se oponen a la deshidratación transportando iones al interior de la célula y sintetizando moléculas más pequeñas. Por otro lado, si se colocan en agua pura, deben reducir su concentración interna de iones y de pequeñas moléculas. Para ello, utilizan Canales Mecanosensitivos que abiertos permiten que aproximadamente el 95% de pequeñas moléculas, como los aminoácidos, los azúcares, y los iones del potasio se escapen hacia fuera. Sin embargo, guardan sus proteínas o ribosomas con seguridad dentro de si, recuperandose rápidamente para empezar en pocos minutos la síntesis de proteínas, cuando las condiciones vuelvan a la normalidad.
Como Válvulas de presión
Los MscS, o Canales Mecanosensitivos de pequeña conductancia, se componen de siete cadenas idénticas dispuestas para formar un tubo. Una porción de ella cruza la membrana y forma un poro barosensible de cerca de 13 angstromes en diámetro. Esto es apenas grande bastante pasar las pequeños moléculas e iones. La porción citoplásmica (demostrada en la parte inferior aquí) forma un casquillo sobre el poro, creando una antecámara que limita el tamaño de las moléculas que pueden alcanzar el poro cuando se abren. El canal de los MscS, demostrado en la entrada 2oau de PDB), se abre a presiones bajas y moderadas. Éstos responden a la presión intracelular, abriéndose cuando consiguen niveles peligrosos. Detectan esta presión sensando cambios en las características de la membrana, por tanto cuando la membrana es estirada por altas presiones internas, acciona el cambio conformacional que abre el canal. La célula tiene diversos canales que se abran en diversos niveles de presión.
Canales Largos
Los MscL, o Canales Mecanosensitivos de gran conductancia (entrada 2oar del PDB), entran en juego en emergencias calamitosas, cuando la presión consigue tan alta que la célula pudiera estallar. Se abren para formar un poro más grande que el canal de los MscS con una abertura de 30-40 angstroms. Se componen de cinco cadenas idénticas que se abren, como el diafragma de una cámara, cuando la membrana celular se estira firmemente.
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